Si regalas flores transmites la belleza de la naturaleza y la compartes con la otra persona. Muestras tu sensibilidad: es una forma sutil de conquistar.
Para conquistar o mantener, cualquier color funciona desde que justifiques el por qué. Por ejemplo, te regalo estas ROSAS ANARANJADAS porque su color me recuerda tu energía. Con esto le comunicas tus emociones, empiezas a conquistar.
Las ROSAS ROJAS tienen un gran espectro de ocasiones. Si tu amor es apasionado, escoge las rojas oscuras; para un amor maduro unas rojas más suaves.
Ojo: Las rosas rojas pueden no siempre funcionar. A veces, la mujer que ha recibido muchas en su vida las considera banales y querrá un color más original, uno que tenga que ver con su personalidad o su estado anímico. ¡No seas un transmisor banal!
El estado anímico de la mujer influye en el tipo de rosas para regalarle. Si está deprimida, necesita colores que la animen como los AMARILLOSOS Y NARANJAS. Si está emprendiendo algo nuevo en su vida regálale AMARILLAS. Si está en búsqueda de la espiritualidad regálale FUCSIAS O LILAS. Si necesita pechiche, ¡qué mejor que las ROSADAS! Si necesita fantasía, un TUTTI-FRUTTI de colores. Si le encanta lo pequeño regálale un arreglo de ENANAS: las rositas miniatura son un detonador de ternura.
Para enviar a la CASA, las ROSAS EN CAJA son impactantes, pero ya en la casa de la destinataria alguien deberá ponerlas en el florero; esto implica una pequeña dedicación, por lo tanto, un ARREGLO ya hecho es más práctico para ella. Para enviar a la OFICINA, lo mejor es un pequeño bouquet en celofán con agua, llamado acuarela. Lo colocará sobre su escritorio, así te tendrá presente todo el día.
¿Qué es mejor: mandarle las flores a la oficina o la casa? A veces preferirá a la oficina, pues allí las mostrará a sus compañeras: habrá seguramente emociones y comentarios en torno a ellas, tu obsequio se potencializa. A veces preferirá disfrutarlas en la intimidad de su hogar, sólo para ella. Lo mejor es preguntarle.
Si metiste la pata, opta por las BLANCAS, es el color del perdón. ¡Funciona!
No olvides una tarjeta con mensaje: Su contenido, así como su redacción, son importantes: ella verá que tienes valor; y te haces conocer más, entras en su intimidad.
Buena suerte.
